Saca los quesos de la nevera para que se atemperen entre 15 y 20 minutos. Córtalos de distintas formas con un cuchillo bien afilado y añádelos a tu tabla. Te recomendamos partir los blandos en cuñas, los duros en dados e incluso cortar alguna variedad en bloques más grandes.
Suma frescura a tu tabla con distintas frutas. Puedes añadir fresas, uvas, kiwi...
Añade un toque crujiente con nueces y crackers.
Suma dulzura con tus dips favoritos. Te sugerimos mermelada, miel o incluso membrillo.